Causas del Síndrome de Costen

Principales Causas del Síndrome de Costen

El Síndrome de Costen se define como una disfunción temporomandibular caracterizada por chasquidos articulares, alteración de los rangos y la calidad de movimiento articular, así como dolor y disconfort en la articulación de la mandíbula. Este dolor frecuentemente provoca también dolor cervical, en la región del oído, hombros o cabeza. Además, se describen síntomas vertiginosos o zumbidos en los oídos que pueden deberse a esta disfunción temporomandibular.

Causas del Síndrome de Costen

1. Maloclusión dental

Una de las causas recogidas en la bibliografía puede ser la maloclusión dental, que es un déficit en la correcta alineación de los dientes durante la mordida. Esto provoca un desequilibrio de fuerzas, ya que ambas articulaciones temporomandibulares junto con la arcada dentaria se configuran como un trípode de fuerzas. Un déficit de estabilidad en la mordida repercutirá en una sobrecarga unilateral o bilateral de las articulaciones temporomandibulares (ATM), añadiendo estrés a sus estructuras ligamentarias y osteomusculares y provocando sintomatología como dolor, bloqueo y dificultad en la apertura bucal.

2. Traumatismos

Otra causa atribuible, aunque menos frecuente, son los traumatismos. Estos pueden ser traumatismos directos en la ATM (que precisen o no cirugía), traumatismos en la región craneal (importante influencia de huesos del cráneo como el temporal o el esfenoides) y/o traumatismos en la región cervical, como el caso típico del Whiplash (latigazo cervical), que también puede repercutir en la ATM.

3. Cambios degenerativos

La tercera causa que se podría describir para el Síndrome de Costen son los cambios degenerativos propios de la edad. También existen algunas enfermedades sistémicas osteo-articulares o musculares que debutan con sintomatología precoz en esta zona. Los cambios degenerativos en la región discal de la ATM pueden provocar inestabilidad articular, dolor y disfunción que afecten de manera evidente al individuo en sus actividades orofaciales.

4. Estrés y bruxismo

Por último, causas como el estrés que favorecen una conducta bruxista (apretadora) se exponen también como factores etiológicos y concomitantes con el Síndrome de Costen.

En cualquier caso, y una vez analizada la causa, este frecuente y complejo síndrome precisará un abordaje multidisciplinar adecuado y específico para cada paciente.

En Clínica Fisioexpert estamos especializados en el tratamiento craneo-mandibular (ATM). Si usted o un ser querido está experimentando el Síndrome de Costen, no dude en ponerse en contacto con nosotros para explorar cómo podemos ayudar. Contáctanos.

Bibliografía

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